lunes, 12 de julio de 2010

El menú

El sábado a media mañana.

Yo a mi hija: Cariño, pregúntale a la mami, por favor, qué vamos a comer hoy.
E: Vale.

Se va corriendo. Al poco vuelve.

E: Dice que vamos a comer tortellini.
Y: Huuuum... Vale.

Al rato.

Mi mujer a mí: ¿Hoy vamos a comer tortellini?
Y: No sé. Lo has dicho tú, ¿no?

Sonrisa pícara de mi hija.

Mi mujer: No. Lo has dicho tú. Yo le he dicho risotto.

Ese día a la mensajera no le apetecía comer arroz, prefería pasta.

1 comentario:

  1. ¡Ay, vaya par de pardillas inocentonas!
    Pero es un buen ejemplo de cómo cambiar el mundo con las palabras... y de juego de estrategia ;)
    Menos mal que nosotras luego contrastamos datos jejeje

    ResponderEliminar