sábado, 27 de marzo de 2010

La importancia de las formas

Cuando mi hija empezó a hablar era bastante brusca y decía cosas como "mama, que me lo des", o "que vengas"... y no, no era lo que oía en casa, porque justamente para evitar eso lo adornábamos todo con unas florituras que ríete de los modernistas y barrocos. En fin, que una de las veces que se dirigió a mí de esa manera, no se me ocurrió otra cosa que decirle:

Y: Cariño, se dice "mama, tú que eres tan guapa y tan lista, ¿puedes (...) por favor?"

Y a saber por qué le hizo tanta gracia que todavía hoy, cuando le dices "No, cariño ¿cómo se dice?" Ella contesta, venga o no al caso "tú que eres tan guapa y tan lista" y nos echamos las dos a reír.

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